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Obra intervenida: “La entrega de las llaves a San Pedro” de Pietro Perugino.

Par conceptual: ESPACIALIDAD y PERIODIZACIÓN

 

En este trabajo práctico se busca abordar los conceptos de espacialidad y periodización mediante la intervención/creación de un fresco con la intención de retratar linealmente la evolución de los periodos desde el renacimiento temprano, hasta el manierismo, para lograr transmitir la idea del par conceptual presentado.

Para entender las operaciones en el fresco primero hay que hablar de los conceptos y su relación entre sí. Como primer punto a analizar,la periodización es una herramienta que consiste en dividir la historia en periodos diferenciados empleando ciertos criterios comunes, como transformaciones culturales, sociales, técnicas o estéticas. En relación al arte y arquitectura, la periodización se utiliza para identificar estilos, lenguajes o interpretaciones de un momento histórico determinado como pueden ser el Gótico, Renacimiento, Manierismo, Barroco.

Por otro lado, el concepto de espacialidad en la arquitectura se refiere a la manera en que el espacio es concebido, organizado, y experimentado dentro de una obra arquitectónica. Específicamente en el Renacimiento, se produce una revolución en la concepción de la espacialidad, ya sea en el arte como en la arquitectura, mediante el desarrollo de la perspectiva...

Durante el Renacimiento, la concepción del espacio arquitectónico se transforma profundamente. Según Norberg-Schulz, el espacio deja de ser una suma de partes funcionales para convertirse en una entidad homogénea, estructurada por principios geométricos y visualmente organizada mediante la perspectiva. Esta nueva espacialidad refleja una visión del mundo ordenada, racional y divina, donde cada edificio se concibe como una totalidad cerrada, autónoma y perfecta. Benévolo complementa esta visión al destacar cómo la perspectiva permite racionalizar los espacios; estos expresan la confianza en la razón humana y en la capacidad del hombre para reflejar la armonía del universo.En cambio, el Manierismo introduce una ruptura con esta concepción. Aunque parte de principios similares, se contradice con los modelos renacentistas al introducir una espacialidad dinámica y disruptiva. Norberg-Schulz señala que el espacio manierista ya no es solo un contenedor racional, sino un medio de expresión directa, cargado de tensiones, ambigüedades y contradicciones. La arquitectura manierista se vuelve introspectiva, y el espacio se convierte en escenario de conflictos no resueltos, donde la forma ya no busca la perfección, sino la perturbación y la experiencia subjetiva. Benévolo también observa cómo el manierismo, al permitir la transgresión de los órdenes clásicos, abre paso a una arquitectura más empírica, donde la espacialidad se vuelve ambigua, fragmentada y abierta a múltiples interpretaciones.

 

 

Operaciones en la obra:

 

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La inclusión de la catedral de la Santa Maria del Fiore de Alberti y Brunelleschi muestra una de las obras más representativas del renacimiento temprano (Quattrocento). Se ubica a la izquierda conformando en conjunto con los otros edificios un orden cronológico de los periodos trabajados.

 

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En el centro de la imagen aparece el templete de San Pedro de Bramante, este edificio es comúnmente utilizado como símbolo del renacimiento en su máxima expresión, ya que se considera que sintetiza a la perfección los principios de este periodo. Este se ubica en el eje central de la obra representando la simetría y la armonía, características propias del renacimiento.

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A la izquierda se encuentra la Villa Rotonda de Palladio, una residencia papal reconocida como una de las obras más paradigmáticas del Manierismo, ya que cuenta con todas las operaciones propias del Renacimiento, con una excepción, presenta una cúpula, la cual solo se utilizaba en edificios religiosos. Los tres edificios que representan cada periodo en la obra comparten entre sí un elemento arquitectónico muy utilizado en estas épocas, la cúpula. Aunque en cada edificio tiene una carga simbólica distinta y característica del periodo del cual forma parte.

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Inclusión de elementos de la obra “el juicio final” de Miguel Ángel. Sobre la Villa rotonda, en la zona de la pintura que destaca el periodo manierista. Las personas aparecen flotando sin ninguna estructura o perspectiva que ordene la composición, además también busca representar el caos propio de la obra original de Miguel Angel.

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​En segundo plano vemos una acumulación de gente, que si vemos de izquierda a derecha se puede observar una transición entre el orden o quietud y el caos o movimiento, esta transformación representa simbólicamente la transición cronológica entre los periodos trabajados en la obra (en este caso edificios), que también están previstos de izquierda a derecha.

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En la escena principal de la obra se puede observar un conjunto de los arquitectos/artistas más influyentes durante los periodos tratados en el trabajo, los protagonistas son Brunelleschi que le entrega a Paladio las llaves de San Pedro, simbolizando la transición de épocas. Por detrás de estos se encuentran de izquierda a derecha: Michelozzo (1396-1472), Leon Battista Alberti (1404-1472), Donato d’Angelo Bramante (1443-1514) y Miguel Angel (1475-1564).

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